Radiografía de los 40° en mayo en España: ni rastro de ellos hasta 2006 y siete en 19 años

El guion meteorológico de mayo de 2025 es un auténtico plagio del mismo periodo de 2024: un mes que transcurría plácidamente con un ambiente fresco y chubascos cuando llegó un final de infierno, con unas temperaturas de pleno verano en primavera en buena parte de la Península, especialmente en el norte, el este y el sur. El pasado jueves, y todavía queda por delante un fin de semana que se anuncia duro, se superó la barrera de los 40° en mayo en Sevilla capital.

Se trata de los primeros 40° del año en España y es apenas la tercera vez que ocurre en un mes de mayo en el observatorio del aeropuerto hispalense desde 1951, fecha en la que comienzan los registros. Antes, solo se había alcanzado esta cota a esta altura de año, que hace unas décadas era inimaginable, en dos ocasiones, en dos episodios tórridos con los que se tutea el actual: en mayo de 2015 y en mayo de 2022. Este viernes, El Granado (Huelva) ha subido la apuesta al marcar 41,6°, seguido de 40,1° de Fuentes de Andalucía (Sevilla) y de la propia capital andaluza, que se ha quedado a las puertas, en 39,8°.

¿Es excepcional alcanzar los 40° en mayo o es algo que ocurre habitualmente, como sostienen los negacionistas? “No es del todo extraordinario, no es inédito, pero sí inusual”, responde tajante Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), para destacar que las temperaturas que se están registrando estos días son entre 5° y 10° superiores a los valores habituales, incluso casi 15° en las zonas más castigadas. “Estas temperaturas serían altas pero dentro de lo normal en la canícula, el problema es que estamos en primavera”, alerta el portavoz.

De hecho, una consulta hecha por EL PAÍS al Banco de Datos Climatológicos de la Aemet revela que la primera vez que aparecen los 40° en mayo en los observatorios de la red oficial es muy reciente, en 2006. Según el listado facilitado por este departamento, que abarca hasta 2024, cuatro localidades comparten el dudoso honor de ser las primeras: Córdoba, Almadén (Ciudad Real) y Andújar y Linares (Jaén) superaron la barrera un mismo 17 de mayo con Andújar a la cabeza, donde los termómetros se dispararon a 42,3°. Un día después, Murcia llegó a los 40° exactos.

En estos 19 años transcurridos desde entonces, es el séptimo mayo que ocurre contando los 40° que están cayendo de este mismo mayo. Hasta el momento, Carcaixent, en Valencia, ostenta el techo del calor de este mes en España, con 44,4° a los que escalaron las máximas en 2015.

En el Banco de Datos hay en total 71 anotaciones en localidades de 14 provincias. Hasta 15 de los registros de 40°, donde más, se han producido, sorprendentemente, no en la supuesta sartén de España, la provincia de Sevilla, sino en la de Valencia. Le siguen los 10 de Murcia, ocho en las provincias de Jaén, Córdoba y Las Palmas, seis en Sevilla, cinco en Alicante, dos en Huelva, Almería y Ciudad Real y, el resto, con un caso en cada una, en Badajoz, Málaga, Barcelona y Castellón.

En lo que va de este mayo, habría que sumar a esta lista de 71 registros tres más, dos en Sevilla y una en Huelva, y puede volver a suceder este sábado en algún punto del bajo Guadalquivir, por ejemplo otra vez en Sevilla.

En realidad, como subraya el portavoz de la Aemet, el grueso de las cifras se agrupa en apenas cuatro episodios cálidos sufridos en mayo de 2006, de 2015, de 2022 y de 2024, a los que se suman un dato puntual en 2010 en Laujar de Andarax (Almería) y otro suelto en 2012 en La Aldea de San Nicolás (Gran Canaria, provincia de Las Palmas).

Por orden de mayor a menor, el episodio más tórrido, a muchísima distancia del siguiente, fue el de mayo de 2015, en el que se marcó la cifra maldita 50 veces. En Murcia, Arrecife y La Aldea de San Nicolás pasó en dos ocasiones y, en Valencia, en cuatro. El siguiente peor fue mayo de 2022, cuando hubo una decena de 40°; el de 2006, con cinco; y en el último lugar está 2024, con cuatro.

Para Del Campo, independientemente de cuántas veces se alcance el umbral el episodio actual, el quinto, “fueron peores los de 2015 y 2022 porque se produjeron a mediados de mes, no a finales como ahora”. También le resulta “muy llamativo” la repetición de acontecimientos dos años seguidos, 2024 y 2025.

La localidad donde más veces ha ocurrido no es ninguna sorpresa: Montoro (Córdoba) se lleva la medalla de oro con cinco ocasiones. Montoro ostentaba con 47,4° el récord nacional absoluto de calor hasta agosto de 2021, cuando se lo arrebató por dos décimas La Rambla, en la misma provincia. A Montoro le siguen con la medalla de plata de mayo Valencia, con cuatro anotaciones, y con el bronce La Aldea de San Nicolás, Murcia, Andújar y Córdoba, todas con tres.

La causa detrás de todas estas cifras anómalas está clara: el calentamiento global. Este tipo de episodios de temperaturas extremas fuera de temporada son “más probables por el cambio climático”, recuerda el portavoz de la agencia, para quien “lo destacable de todos estos datos es que hasta 2006 no existían, no hay registros de 40° o más en mayo”. Lo terrible, para el portavoz de Aemet, es la contestación de que “el calor intenso cada vez se adelanta más y cada vez dura más”, en concreto “unos 10 días por década hacia delante y unos tres o cuatro días hacia detrás”.